Puedes sobreponerte a tus miedos a través de la visualización

El miedo es una de las emociones más negativas que podemos cultivar en nuestra mente, pues tiene el poder de paralizarnos, evita que disfrutemos la vida, nos impide tomar decisiones correctas y hace que vivamos presos del temor y la ansiedad. Por esta razón es importante hacer lo que sea que esté en nuestras manos para intentar combatir nuestros miedos y tener una mente en calma. Una excelente herramienta para sobreponerte a tus miedos es la visualización, una técnica que te ayudará a promover el pensamiento positivo y a programar tu mente en función de tu bienestar emocional. No importa si le temes al amor, al trabajo, a los estudios, al futuro o al fracaso, todo el poder para superarlo está en tu mente.

Cómo superar tus miedos a través de la visualización

• Lo primero que debes hacer para superar los miedos a través de la visualización es sincerarte contigo mismo. Piensa a qué le temes, por qué y qué es lo peor que te puede pasar si eso sucede.

• Una vez que tengas identificado el miedo que deseas superar, acuéstate en un lugar tranquilo, silencioso y donde nadie te moleste. Adopta una posición en la que te sientas cómodo, cierra tus ojos y comienza a pensar en tu miedo.

• Visualiza que eso a lo que tanto le temes sucede recreando una experiencia lo más parecida a la realidad. Por ejemplo, si tienes miedo a viajar en un avión puedes imaginar que estás en pleno viaje y el avión comienza a tener turbulencias, se apaga la luz, empieza a descender y el piloto anuncia que es necesario realizar un aterrizaje de emergencia sobre el mar.

• Durante la visualización debes mantener la calma, pensar que se trata solo de pensamientos que han sido creados por ti y encaminar la historia a un resultado positivo. Por ejemplo, el avión comenzó a subir, retomó la altura necesaria y todo fue una falsa alarma. Lo importante es que llenes dicha historia de pensamientos, actitudes y hechos positivos.

• También puedes visualizar a tu miedo como si fuera una persona y hablarle, decirle mentalmente que tú eres más fuerte, que se marche, que es hora de continuar tu vida sin él, que ya no puede dominarte más.