En la vida sentimos emociones positivas y negativas, es decir, sentimientos que nos producen sensaciones óptimas en nuestro interior y que, por ende, nos ayudan a seguir un camino fructífero y lleno de posibilidades y, en cambio, las negativas nos conducen a un camino más oscuro donde abundan los temores y las inseguridades.
Las emociones positivas son las que tenemos que cultivar de mayor grado porque, gracias a ellas, podremos vivir la vida que siempre hemos querido tener dejando atrás sentimientos negativos que podrían afectarnos.
Pero ¿cuáles son estas emociones positivas? Existen 5 tipos que nos conducen a un bienestar generalizado y que nos sirven de guía para poder construir un futuro repleto de felicidad.
Alegría, una de las emociones positivas que no pueden faltar en tu vida
La alegría es ese sentimiento que nos llena de energía, optimismo y nos puede empujar a hacer cosas que, a priori, no nos sentíamos capaces de hacer.
La gratitud
Ser agradecido en la vida nos ayuda a tener más empatía con los demás, a respetar el mundo en el que vivimos y las personas que también forman parte de él. Es una emoción que conduce a la humildad y a la fraternidad, por tanto, indispensable para conseguir una vida estable y con amor.
Serenidad, otra de las emociones más positivas que hay
Se conoce como serenidad esa emoción que nos ayuda a estar estables anímicamente, a tener el control de cualquier situación que pueda ocurrir a nuestro alrededor y de evitar que las emociones negativas puedan alterarnos y hacernos cambiar de perspectiva.
Esperanza
Dicen que la esperanza es lo último que se pierde y es totalmente cierto. Esta emoción tan positiva hace que tengamos confianza en que todo irá bien, en que las cosas, por mala pinta que tengan, pueden dar un vuelco y terminar a buen puerto. Una emoción que nos ayuda a creer cuando todo parece estar perdido.
Amor, otra de las emociones más positivas del ser humano
Y, evidentemente, una de las emociones que mejor pueden llegar a afectar a una persona es el amor, el amor puro, no el desamor ni los problemas amorosos. Esa sensación de amor que invade nuestro cuerpo hace que nos sintamos fuertemente unidos a otra persona y que deseemos que todo le vaya bien. Una forma de dejar atrás el ego y entregarte por completo al ser amado, ya sea pareja, familia o amigo.
Deja una respuesta