¿Alguna vez te has planteado qué es la autoestima? Seguro que siempre has oído a alguien que decía “Esta persona tiene la autoestima baja, tenemos que echarle un cable” o, también, “No tengas la autoestima tan alta, no eres tan listo”. Ambas frases se refieren a dos tipos de personas que tienen autoestimas distintas pero que, igualmente, tienen autoestima.
¿Pero, exactamente, qué es la autoestima? Se trata de la percepción interna que tenemos de nuestra persona. Esos juicios y valores que tenemos acerca de nuestras capacidades, nuestras virtudes y nuestros defectos. En el cómputo de “autoestima” se incluyen aspectos tanto internos como, por ejemplo, la inteligencia, los conocimientos, etcétera, como aspectos externos que se relacionan con el físico.
Esta valoración no es perenne, por tanto, puede ir cambiando a lo largo de los años, tras haber adquirido cierta experiencia y habernos formado como personas. Además, cuando hablamos de “autoestima” no solo lo relacionamos con nuestros valores internos sino que los sacamos al exterior y procuramos ver cómo nos ven los otros.
Así pues, de forma resumida diríamos que la autoestima es la mezcla de las percepciones internas que tenemos de nosotros mismos con la supuesta aceptación externa que creemos que tendrán nuestros valores. Somos seres sociales y, por tanto, estamos muy influenciados a las modas y las tendencias de nuestra época.
Por tanto, pueden existir diferentes tipos de autoestima dependiendo de cómo te veas en global: autoestima inflada, alta y baja. La primera de todas es un exceso de autoestima donde te ves superior al resto, más inteligente, más guapo/a o con más cualidades que los demás. La autoestima alta es la que te permite tener confianza y seguridad en ti mismo y, por tanto, atreverte a vivir tu vida con plenitud. Y, por último, la baja es la que te impide desenvolverte con libertad, la que te pone barreras en tu camino y no te permite crecer y desarrollarte como quisieras.
De todas ellas, la autoestima alta es la que tenemos que procurar trabajar para poder vivir nuestra vida de forma plena y satisfactoria.
Deja una respuesta