Desde que empecé a estudiar Coaching y comencé mi andadura en esta profesión, las preguntas empezaron a formar parte indiscutible de la parte consciente de mi vida. Preguntas que se colaron en mi casa, en mis relaciones con los demás. Preguntas que empezaron a darle forma a mi VIDA, preguntas que aparecían de la nada para traerme un descubrimiento, un OH!, preguntas juguetonas, preguntas difíciles. Preguntas que me llevaban a otros sitios a pasear…
Todas estás preguntas no entraron en mi VIDA cuando empecé con el Coaching. En realidad…
Siempre fui una niña extremadamente curiosa e intrépida.
Una niña traviesa que aprovechaba cualquier mínimo descuido de su madre (que bastante tenía la pobre con otros tres mocosos) para escaparse y adentrarse sin miedo en el desconocido y misterioso mundo de los pasillos del supermercado o las calles del barrio más alejadas.
Siempre he tenido sed de preguntar, de aprender, de saber que hay más allá de lo que ven mis ojos, de conocer más que aquello que se da por hecho. Si hubiese nacido en la última década ¡me hubiesen frito a fármacos anti TDAH seguro!
Y, de entre todas las preguntas que forman parte de mi VIDA ahora, hay una muy especial, muy cortita que, sobre todo desde mi época de adolescenteintrospectivaamantedeloslibroselarteylafilosofíaexistencialista, siempre me he estado haciendo:
¿Te has preguntado alguna vez por qué haces lo que haces? O ¿por qué quieres lo que quieres?
Cuando te haces esta pregunta, algo empieza a funcionar dentro de tu cabecita y tu corazón. Esta pregunta tan simple y tan mal escrita tantas veces, te conecta directamente con tus VALORES más profundos, con tus CREENCIAS más importantes, con la CHISPA que te has empeñado en apagar, con la MAGIA que está al alcance de tus manos. Todos los días.
Y, de repente, lo recuerdas todo. Lo recuerdas porque cuando naciste, tenías una misión. Estaba escrita en tu ADN y sabías cual era. Pero poco a poco la has ido olvidando…
Ya he compartido alguna vez esta cita de Mark Twain:
Los dos días más importantes de tu VIDA son el día que naces y el día que descubres por que.
Así que, te animo a que te levantes todas las mañanas haciéndote esta pregunta, o cualquier otra que te acerque a tu propia RESPUESTA. Probablemente, no encuentres esa respuesta inmediatamente, no te voy a engañar, pero no desistas. Sigue haciéndote preguntas porque, poco a poco, irás accediendo a tu sabiduría innata y si estás receptivo, tu intuición te dará la respuesta. En forma de ideas, o señales…o respuestas tan claras que podrían asustarte.
Y si sabes cual es tu por qué…¿me lo cuentas y me inspiras el día? 🙂
¡Gracias!
Este post me ha gustado mucho. De hecho, me he preguntado ahora mismo POR QUE estoy deseando cambiar de trabajo y he llegado a una buena conclusión. ¡Gracias!
Me alegro mucho Lola! Dale caña! 🙂
Acabo de preguntarme por qué. Por qué quiero exactamente cambiar de departamento, y por qué a un Área concreta. Y también ha salido una respuesta muy esclarecedora. 🙂
Genial Carmen! Que regalo me has hecho hoy, gracias! 🙂
Espectacular la cita de Mark Twain. Épica.
Yo creo que he venido a este mundo para trasformarlo. Quizá en una ciudad las personas no perciben su enorme poder pero en un medio más salvaje se muestra facilmente su verdadera capacidad de trasnformación.
Desde plantar árboles y verlos crecer, hasta desarrollar artes propias para la pesca. Eso son muestras muy obvias de nuestra capacidad. Creo que el grado de realización -y felicidad- de una persona se mide en esos términos.
Yo me quedo en la idea existencialista del DASEIN y a partir de ahí niego a la razón pura. Los estructuralistas me aburren. Creo que fabrican enorme misiles antihumanos. No situo al hombre en el centro del universo porque el universo tambien se trasforma sin la necesidad de este.
¿De donde viene entonces esa potencia que está en nuestros genes? Es pura MAGIA.
Plantar árboles y verlos crecer…no me imagino una actividad que te conecte más rápido con todo el poder de todo aquello que no podemos ni ver ni entender. Estoy totalmente de acuerdo contigo que es una inconmensurable fuente de realización a la que no le damos la importancia que se merece….andamos totalmente perdidos en estas ciudades, perdiendo constantemente oportunidades de CONECTAR y de sentir la MAGIA 🙂
Un abrazo!
Pues la verdad es que si Hana.
Rodeado de esa fuerza es imposible no darse cuenta de los misterios de la Vida. Yo creo que un hombre que renuncia al DASEIN a través de las banalidades de la sociedad moderna deja de ser humano y se convierte en una bonita hortaliza.
El sueño al no que pienso renunciar tiene que ver con el Mar, la navegación y una vida en contacto con el medio natural. No me cansaré de decirte que en tu blog encuentro muy buenas herramientas para gestionar una decisión que ya estaba tomada. Así que desde aquí te doy una vez más las gracias.
Un abrazo!!